Reducción de costes Gestión de la carga máxima: los sistemas de almacenamiento de energía pueden almacenar electricidad durante las horas de baja frecuencia cuando los precios son más bajos y liberarla durante la demanda máxima, reduciendo así los costos de electricidad.
Respuesta a la demanda: Al ajustar el uso de energía, las empresas pueden aprovechar los incentivos en el mercado eléctrico, ahorrando costes adicionales.